Esta tarta la suelo hacer con manzanas, pero tenía unas peras que ya estaban muy maduras así que antes de que se me pongan malas, he decidido usarlas para la tarta. Podéis usar cualquier fruta de temporada madura; con melocotones o ciruelas también queda riquísima.
Es una tarta sencillísima de hacer, de hecho es un bizcocho al que le ponen unos cuartos de manzana o de peras en este caso y nada más. Pero está bien rica, sobre todo si la dejáis jugosita, y se puede acompañar de salsa inglesa o helado de vainilla. Probadla porque el toque especiado que da la canela es buenísimo y contrasta muy bien con las peras que quedan blanditas y jugosas.
Ingredientes
1/2 cup de mantequilla a punto pomada
1 cup harina
1 cup azúcar moreno
1 teaspoon canela molida
1 teaspoon levadura Royal
1/4 teaspoon sal
2 huevos
2 peras maduras
Como casi siempre empezamos por precalentar el horno a 180 ºC.
A continuación en un bowl mezclamos la harina con la levadura, la canela y la sal. En otro bowl se bate la mantequilla con el azúcar hasta que quede una mezcla pálida y cremosa. A continuación se añaden los huevos y se vuelve a batir. Cuando esta mezcla esté lista, le añadimos la de la harina. Volvemos a mezclar todo bien para que se integre y añadimos la masa en el molde redondo que previamente habremos engrasdo y enharinado.
Pelamos las peras y las cortamos en cuartos quitándoles el corazón. Las disponemos de manera regular sobre la tarta y horneamos hasta que esté dorada y al pinchar con una aguja de punto ésta salga limpia. Dependerá de la profundidad del molde, pero suele ser en torno a media hora o cuarenta minutos.
Cuando esté fría se espolvorea con azúcar glass y lista para disfrutar!!